Y los
momentos fueron invisibles
en el
temblor de la noche.
Aquí la
luna me mira, pálida y fría,
minúsculos
filamentos de cristales
cubren
la piel que palpita conmigo.
¿Qué es
real y qué no lo es?
Casi
podía sentir la brisa caliente
bailando
en el pecho,
prófuga
en la espalda
y
ardiente en el cuello.
Ahora la
noche crece
en el
Palacio de Hielo perdido en tus besos.
Entonces
el mundo gira dudoso, lentísimo
,
bajo los
pies que te esperan sólo a vos …
con la
perfección de la savia verde y espesa,
sólo a
vos,
hasta
perder la conciencia en el vórtice invisible de los momentos.
VIDEO CON POEMA
Poema: El Palacio de Hielo
Fotografía:
Mecuro B. Cotto
Tema Musical
de Fondo: Bernward Koch - A Shimmer Of Leave